Opentor
conocimiento es poder

1000 claves de éxito en el mundo de la empresa


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Información editorial
Índice de contenidos
Prólogo / Introducción
Índice alfabético
Contraportada

ÍNDICE COMPLETO

Micro índice:

100 Claves básicas

100 Claves básicas para salir de la crisis

1. Los empresarios

Personalidad y carácter
Tipos de empresarios
Vida y familia
Jubilación

2. Las empresas

La gestión
Las ventas
Negociaciones
Fusiones y adquisiciones
Crisis y reestructuraciones

3. Universidades

Universidades con plena facultas

4. El factor humano

Clientes
Proveedores
Empleados
Directivos
Socios y accionistas
Integración empresarial

5. El selectivo reflex 35

Anécdotas empresariales

Integración empresarial


964. LA CAPACIDAD DE LA DISCAPACIDAD

  • La principal barrera para un empleado con discapacidad no es precisamente su minusvalía, sino la barrera mental del empresario al admitir en su entorno un modelo no estereotipado.

  • La imagen externa «roba» gran parte del peso específico de un C.V. en el momento de acceder a un puesto de trabajo. Por esto, una persona con discapacidad suele verse obligada a tener que demostrar, constantemente, un valor añadido para «suplir» su minusvalía.

  • Ofrecer un puesto de trabajo a una persona con discapacidad tiene grandes posibilidades de éxito. No sólo se le brinda a este empleado la viabilidad de poder desarrollarse profesionalmente, sino también se le abre la oportunidad, muchas veces única, de demostrar su valía a sí mismo y a los demás. Estaremos contribuyendo a aumentar su autonomía personal y su autoestima, condiciones estas indispensables para que una persona pueda sentirse como tal: persona.

  • Contratar a una persona con discapacidad es apostar por las diferencias. En una sociedad plural y diversa como la nuestra, admitir esto es estar abierto al aprendizaje y, por lo tanto, a crecer. Las diferencias, precisamente, son las que nos hacen a todos más iguales en nuestra condición humana.

  • La discapacidad en la Empresa no debería tener un capítulo aparte. Cualquier signo de protagonismo hacia un colectivo determinado deja entrever que esa situación no está realmente normalizada. (Una situación socialmente normalizada no tiene día de…)

  • El empresario, no obstante, también tiene que tener en cuenta que la discapacidad no es salvoconducto de nada. A la hora de contratar a una persona con minusvalía deberá valorar todos los «bienes» y los «males» terrenales a los que estamos sujetos todas las personas.

  • Uno de los principales enemigos de una persona discapacitada para encontrar trabajo es la «desinformación» del empresario en cuanto a las contraprestaciones que puede obtener por este tipo de contrataciones laborales. Hay que tener en cuenta que la falta de información siempre provoca una huída.

  • Cuando un empresario tenga dudas sobre la posibilidad de contratar personas con discapacidad en su Empresa, debe meditar que todos somos minusválidos en algo y no por ello dejamos de ser válidos en algo.

  • Hacer accesible un puesto de trabajo o una «web», tiene coste cero si se tiene en cuenta desde el principio. Por ejemplo: antes de comenzar una obra, pensar en el ancho de puerta de un aseo, no grava el presupuesto y, sin embargo, sí puede imposibilitar el paso de una silla de ruedas si no se ha previsto.

  • La función primordial para una Empresa es generar, de forma sostenida y a largo plazo, valor para el accionista. Es decir, las Empresas tienen que ser rentables pero tampoco deben olvidar su compromiso con la sociedad. La integración laboral y la creación de empleo para discapacitados es una clara apuesta de gestión por la «rentabilidad social». Estos retos solidarios deberían ser universales.

  • Desgraciadamente, la mujer discapacitada sufre «dos minusvalías»; una es la suya propia y la otra es la herencia social de una sociedad como la nuestra, todavía machista, de la que la Empresa tampoco está exenta. Y ello suele repercutir tanto en las oportunidades como en el sueldo.

  • No es necesario buscar un Stephen Hawking para rendir pleitesía al mundo de la discapacidad. Al igual que en el mundo de los «validos», también existen muchos «premios Nobel» camuflados bajo el humus. El desafío del Empresario audaz pasa por saber detectar la madera donde otros sólo vieron leña.

  • Lamentablemente un empresario es mucho más sensible y receptivo a la discapacidad cuando tiene en su entorno cercano a alguien que la sufre. Esto es igual de lamentable que el hecho de poner un semáforo en un cruce peligroso, sólo después de que se haya producido uno o varios accidentes mortales.

  • Trabajo y discapacidad no deben ser sinónimos de «limosna por caridad», sino de «oportunidad como los demás».